Haciendo una Diferencia
Dios nos ha dado dones, talentos y tiempo. Como creyentes, tenemos la gran oportunidad de alabar y glorificar a Dios por medio de la disciplina espiritual del servicio. Haz click en el botón para ver oportunidades de servicio específicas cerca de ti.
POR QUÉ SERVIMOS
Servimos porque Cristo sirvió, y queremos ser más como Él.
“…así como el Hijo del hombre no vino para que le sirvan, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.”
Mateo 20:28
Somos agradecidos, sirviendo de todo lo que Él ha hecho por nosotros.
“Hagan lo que hagan, trabajen de buena gana, como para el Señor y no como para nadie en este mundo, conscientes de que el Señor los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor.”
Colosenses 3:23-24
Estamos llamados y equipados para servir.
“Cada uno ponga al servicio de los demás el don que haya recibido, administrando fielmente la gracia de Dios en sus diversas formas.”
1 Pedro 4:10
Servimos para compartir las Buenas Noticias y darle gloria a Dios, para que aquellos que no lo conozcan lo vean a Él por medio de nosotros.
“De la misma manera, dejen que sus buenas acciones brillen a la vista de todos, para que todos alaben a su Padre celestial.”
Mateo 5:16
Sirviendo Juntos
Una de las maneras más significativas en las que una familia puede unirse más a Dios y entre ellos es haciendo actos sencillos de servicio juntos. Servir juntos fortalece tu matrimonio y a tu familia, pero también profundiza tu fe. Algo único y especial sucede cuando esas experiencias compartidas hacen una diferencia en las vidas de otros. Al servir juntos, no solo bendices a los que están a tu alrededor, sino que también bendices a tu propio hogar.
LOS BENEFICIOS INCLUYEN
- El placer de hacer una diferencia juntos
- Una oportunidad de enfatizar virtudes como la generosidad y humildad
- Un mayor sentido de gratitud al exponerte a aquellos en necesidad
- Un vínculo especial y momentos juntos
- Ver que Dios usa a cada uno
- Oportunidades para modelar el servicio a tus hijos/nietos
- Descubrir cómo Dios ha creado a tu familia para servir
SIRVIENDO CON TU CÓNYUGE
- Ayuda a crear intimidad
- Te permite aprender más el uno sobre el otro
- Provee oportunidades para una mejor comunicación
- Modela una colaboración significativa